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El lugar donde se guardan las vitaminas y los suplementos dietarios es una decisión más delicada de lo que parece a primera vista. La fuerte humedad presente en la cocina y el baño, los sitios de almacenamiento más habituales, podría degradar los nutrientes aún cuando la tapa del envase esté firmemente cerrada.
A dichas conclusiones llegaron especialistas de
"Si hay humedad o los ingredientes se disuelven, disminuirá la calidad y la durabilidad de los nutrientes. Dependiendo de las condiciones y de las fórmulas, la pérdida puede ser parcial o completa", dijo Lisa Mauer, un miembro del equipo.
EL FENÓMENO DE
Mauer analizó el fenómeno de la delicuescencia, que ocurre cuando una sustancia absorbe la humedad del ambiente y como consecuencia se vuelve más líquida. Algunos suplementos comienzan a retener agua cuando la humedad del ambiente alcanza el 80% o 90%, pero otros ya comienzan a sufrir daños con un 30% de humedad.
Cuando este vapor de agua se incorpora al complemento dietario o vitamina, los ingredientes se disuelven y pierden sus propiedades. Al volver a solidificarse el daño ya es irreversible. Por ese motivo, la especialista recalcó que es fundamental guardar estos compuestos lejos del baño y de la cocina.
Además, algunas vitaminas y suplementos son químicamente inestables y esto los vuelve más propensos a la degradación. Contar con una tapa que los cierre herméticamente no evita el problema ya que abrir el frasco, aunque sea por unos segundos, los expone a la humedad.
Mauer dijo que otro signo de degradación de los ingredientes es la presencia de manchas marrones, que especialmente aparecen en las vitaminas de los niños.
La especialista recomendó tirar los tarros que contienen este material, ya que su efectividad es probablemente mucho menor. "No son necesariamente inseguros, pero no tiene sentido darle una vitamina que no funciona a un niño. Si los ingrediente no son efectivos, es como darles un caramelo con mucho azúcar", explicó.
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